La Papisa o La sacerdotisa es la segunda
carta de los Arcanos Mayores en la baraja del Tarot. Esta carta nos muestra a
una mujer sentada sobre un cuadrado en medio de dos columnas que representan la
dualidad (el bien y el mal, lo blanco y lo negro, etc.), la mujer tiene una
hoja que habla sobre el tarot y en la parte baja de su vestido vemos a la Luna.
Lo que nos intenta transmitir esta
carta es la necesidad de introspección y de análisis ante los problemas que
acarrea la dualidad y la visión equivoca de las cosas, pues esta la luna que es
ver las cosas desde un punto de vista más intuitivo y más reflexivo, además la
mujer está sentada sobre el cuadrado que representa la racionalidad. La unión
de estos elementos también hacen que la carta de El Tarot funcione como un
espejo que refleja nuestra conciencia y nos hace cuestionarnos para que
encontremos las respuestas en nuestro interior comenzando por la racionalidad característica
de nuestra raza y llegando a lo mas intimo y profundo por medio de nuestra
intuición y desde ese punto de vista que nos da la luna (A la luz la luna todo
se ve diferente, revela su otra cara y se vuelve más misterioso y a veces más
atractivo).
La personalidad de esta carta es
intrigante, transmite una seguridad en sí misma como si conociera todos los
aspectos del universo, pero a su vez nos invita a cuestionarnos como si quisiera
averiguarlo todo. Aunque esto lo hace de una manera serena, sabia y tranquila,
no a modo de chisme ni con afán como si no le interesara la respuesta si no solo cuestionar. Ella solo está ahí tranquila y reflexiva tal
vez conociéndonos mas de lo que nosotros nos conocemos y haciéndonos aprender
sobre nosotros mismos inclusive mas cosas de las que conocemos.
El color de la senda - Todo Sobre Esoterismo Y Tarot
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